¿Conoces la historia del queso de cabra? Se trata del primer queso elaborado por artesanos. Los primeros datos que se tienen sobre este producto datan del ¡7000 antes de Cristo!
Historia del queso de cabra ¿Cómo empezó todo?
Hace mucho tiempo, antes de que el ser humano comenzase a desarrollar el mundo que ahora conocemos, las personas se organizaban en tribus nómadas, moviéndose de un espacio a otro buscando el mejor entorno para sobrevivir a las diferentes estaciones.
Aquí es cuando surge una de las profesiones más antiguas, el pastoreo de cabras. Las cabras eran especialmente útiles, ya que al criarlas podían ofrecer leche, carne, piel e incluso ¡pelo! con el que poder confeccionar pinceles.
Este transcurso migratorio llegó a su fin alrededor del 7000 mil antes de Cristo ¿recuerdas la fecha? Bien, pues fue en este momento cuando el hombre prehistórico comenzó su etapa de sedentarización, y aquí fue cuando comenzaron a experimentar con la leche que provenía de las cabras.
¿Cómo empieza la historia del queso de cabra? ¿Cómo lo confeccionaron los artesanos primigenios? Lo primero, claro está, era el proceso de ordeñar a la cabra, y seguidamente, se cuajaba la leche con gotas de jugo de limón para posteriormente colocarla en bolsas especiales que ayudaban al proceso de creación de este lácteo delicioso.
Al principio se utilizaba limón, vinagre o cuajo de cabritos para coagular la leche, posteriormente, se comenzó a utilizar enzimas quininas extraídas del cuajo de rumiantes de poca edad, o de algunos vegetales.
Los pedazos de la cuajada cortada eran colocados sobre una tela de lino o algodón que era colocado dentro de anillos o moldes de palma trenzada, y posteriormente, se cubrían con tablas circulares, con algún peso sobre ellas para que prensaran la cuajada y se expulsara la mayor cantidad de suero en el menor tiempo posible.
La historia del queso de cabra es extensa, y actualmente se ha modernizado el proceso de producción del lácteo, sin embargo, aún quedan formas y detalles artesanales que evocan sabores ancestrales, métodos que han pasado de generación en generación desde los primeros pastores, hace más de 7000 años.
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