Tras dieciséis anteriores, Pozán de Vero celebrará el próximo sábado la edición número diecisiete de la Fiesta de la Chireta de Pozán de Vero, organizada por los vecinos de la localidad. Un día que promete ser delicioso desde primera hora. Concretamente, con sabor a chiretas, un manjar altoaragonés de larguísima tradición.
Fiesta de la chireta de Pozán de Vero, una cita gastronómica de gran éxito
Siempre puntuales a su cita, año tras año, a las 11:00h se reúnen todas las mujeres del pueblo en la plaza de la localidad para comenzar con la preparación de las chiretas. En sus manos, se refleja perfectamente la veteranía en esta y otras labores, el trabajo duro, y el tesón y el esfuerzo que, en muchos casos, son inagotables aun con edades muy avanzadas.
Puntada tras puntada, las vecinas van cosiendo una tripa de cordero rellena de arroz, trocitos de cordero, y muchas especias donde destacan el ajo y el perejil, propias de la vega del Vero. Durante la pasada edición, se prepararon nada más y nada menos que 2.200 chiretas.
Elaboración de las chiretas: un proceso laborioso realizado por las mujeres
Sin duda, la experiencia siempre es un grado. La tripa es resbaladiza, húmeda, nada fácil de manipular, y mucho menos trabajar ¿A qué se debe? Una película de grasa recubre toda su superficie. Si bien es cierto que esta característica complica la tarea, es una de las claves para que el plato tenga un sabor tan delicioso de la chireta.
Tras la cocción, la grasa queda en la superficie del agua. Antiguamente, las abuelas de esta localidad aprovechaban esta agua de cocción, enriquecida por la grasa de las chiretas, para hacer caldos y sopas de pan. Una verdadera lección de aprovechamiento en tiempos de auténtica necesidad.
Cosidas las chiretas, toca preparar el acompañamiento. Tras la hora y media de cocción de las chiretas, todas las raciones serán servidas con chorizo y torteta como acompañamiento. Una combinación deliciosa muy típica del Somontano.
Cocinadas las chiretas… ¡solo queda disfrutar!
Los hombres, por su parte, cortan la madera y ponen un enorme caldero en el fuego. Con una capacidad de 650 litros de agua, en una sola cocción se podrá cocinar todas las chiretas. Por supuesto, el agua de cocción estará previamente preparada con pollo y verduras de la zona para que el resultado sea perfecto.
A partir de las 13:30h. está previsto comenzar a servir las raciones… ¡y los vecinos y visitantes a degustarlas! Una fila enorme de hombres, mujeres y niños, atraviesa, edición tras edición, la plaza del pueblo de lado a lado. Aquellos que no han probado nunca este manjar, desean impacientes su generosa ración. Por otra parte, los más veteranos, pertrechados con grandes cajones, reservan previamente una o media docena de chiretas para llevar a sus familias.
La Fiesta de la Chireta de Pozán de Vero, una jornada gastronómica de gran valor cultural y larga tradición, donde los vecinos trabajan incansables, año tras año, codo con codo, para que todo salga a las mil maravillas, en el que se ha convertido en un auténtico homenaje a este delicioso manjar altoaragonés.
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